💡 Algunas consideraciones a tener en cuenta sobre la inflamación de las arterias y el consecuente nivel elevado de colesterol
Las causas de ésta son, generalmente, una alimentación inadecuada a base de cereales y otros granos, legumbres, azúcares, o ciertas grasas vegetales, así como el cocinado en exceso de los alimentos, una vida sedentaria, fumar, o el estrés.
Las grasas saturadas no son el problema, y hay numerosos estudios que confirman la no correlación de su consumo con los niveles de colesterol. Carnes rojas, huevos, mantequilla, quesos,… pueden ser saludables si resultan compatibles con tu tipo de metabolismo.
Para reducir la inflamación y los niveles de colesterol debes, por tanto, reducir o eliminar por completo esos alimentos causantes de la misma, especialmente granos y azúcares, como la fructosa presente en frutas, que no por ser natural resulta saludable. Debes, también, aumentar el consumo de grasas omega 3, una de las mejores fuentes es el aceite de krill, y consumir también otras grasas saludables como las presentes en el aceite de oliva virgen extra, el aceite de coco, ghee o mantequilla, frutos secos y semillas, aguacates, huevos, pescados salvajes y carne de animales de cría orgánica alimentados con pasto, así como evitar el tabaco, el alcohol y el estrés y realizar ejercicio regularmente.
Fuente: Dr. J. Mercola (artículo web)